LÁGRIMAS PRÍSTINAS

Veo mis huellas entre las nubes desdibujarse con suma rapidez. La única forma de que permanezcan es en la quietud entre los pasos.

Respiro de vuelta a todas mis partículas. Habían abandonado mi cuerpo para intentar alcanzar el futuro.

Vuelvo al centro y desde aquí pido permiso para que mis raíces se entrelacen con el corazón de la tierra hasta volver a latir al unísono.

Las nubes me piden que sienta en mi cuerpo la magia que se ha producido en círculo hoy.

A punto he estado de olvidarme de saborear la belleza de lo “ya alcanzado”.

Siento bajar por mi mejilla una gota de rocío. Es tan pura, que en ella se refleja toda la luz del universo.

Una lágrima de vida que lo contiene todo.

A través de ella, soy capaz de admirar la creación con ojos prístinos.

De vivir la experiencia humana con la curiosidad de una mariposa.

Vuelvo a sentir la certeza de que todos somos uno y que ese uno es Amor... Acto seguido aparece el miedo a volver a olvidarlo.

“Nunca vas a perder el camino, porque eres el camino. No existirías, si no fueras así”, me reconfortan las olas.

Desato de mis alas los pesos de los objetivos futuros y siento el viento levantarme con dulzura, invitándome a crear despacio, desde este estado de presencia, un nuevo sueño, que en realidad ya está siendo habitado por mi corazón.

Feliz siembra de presencia,

Con Amor,

Vanja 🤍 Artistrologie